domingo, 31 de mayo de 2009

Senderismo: Peñalara (C. de Madrid)


El viernes pasado fui a Peñalara, ya hacia tiempo que tenía ganas de hacer una rutilla por allí, principalmente por una razón, la frase que me dijo un día mi futuro cuñado Rubén:
  • En la zona donde estés, siempre hay que llegar a lo más alto posible.
En este caso, el pico de Peñalara es el techo de la Comunidad de Madrid, con 2.430 metros de altura. Con todo esto, viene la segunda frase, dicha por mi abuelo muchas veces:
  • Chaval, todo tieso y para adelante.
Entonces, ahora viene la tercera frase, dicha por mi amigo "Davicin":
  • Abelius en modo viaje - montaña.
Cogí el cercanias, luego el funicular y llegué a Cotos. Allí estuve en la casa del parque, y me dieron la información sobre las rutas. Para llegar hasta el pico, una vez se empieza a subir, nos encontramos con un cruce, debemos coger el de más a la izquierda. Seguimos subiendo y nos volvemos a encontrar con otro cruce, cogeremos de nuevo el de la izquierda y allí empieza una ascensión un poco complicada en forma de zig-zag. Una vez superado esto, llegar a la cima es facil.

El la cima disfruté de unas vistas increibles, divisando Segovia, La granja de San Ildefonso, más numerosos picos, como Navacerrada, Canto Cochino, Montón de Paja, Las Machotas, etc.





Seguí caminando hasta el pico de los Claveles y una vez allí comence a descender, observando una serie de lagunas espectaculares, que son patrimonio natural, hasta llegar a la laguna grande, que a mi personalmente, me decepciono un poco, pero bueno, ye lo que ahí, jejeje.


Y nada, con todo lo visto, comence a descender hasta llegar a una buena fuente con un agua espectacular ya casi cerca de la casa del parque, donde comí un buen bocata de chorizo de León (Concretamente de San Román de la Vega, más concretamente, de mi casa, ese choricito casero no tiene precio) . La ruta duró unas cuatro horas y media a un ritmo suave.
Al final heladito rico y vuelta al funicular y al cercanias, un buen viernes.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Felicitats campió!


El fútbol se puede entender e interpretar de muchas maneras, como deporte, como espectáculo, como pan y circo, etc. Esta noche el Barça ha demostrado la grandeza de un deporte llamado fútbol, llevando su belleza al máximo exponente.

Sigo enamorado del juego de la selección española, pero tengo un amante, que es el Barça. Ese club ha demostrado como se hacen las cosas. Encabezando la nave tienen un entrenador que ha mamado ese club, desde que era un niño en la masía. Él ha sabido impregnar de ese espíritu a todo el equípo, un equipo que ha jugado una final de la Champions con siete canteranos, siete. Esto demuestra que los clubs se pueden hacer con eso, con su gente, gente que llevaba al colegio la mochila de su equipo. No quiero decir que no se fiche a gente de fuera, ni que cerremos las estúpidas fronteras, solo digo, que estos jugadores han portado la bandera del compromiso con un club, con lo que representa y con su gente, y para llevarla, hay que haberlo mamado. Sueño con que un día mi Atleti cuente al lado de Forlan y Agüero con Dominguez, Camacho, De Gea...

El Barça representa mucho, y es la ilusión de un pueblo reflejada en un equipo, y cuando ese equipo juega con gente del pueblo, este, en días como hoy, siente esa victoria un poco más suya.

Por todo ello, al lado de AUPA ATLETI! quiero escribir VISCA BARÇA!!!

Detrás de todo equipo, detrás de todo momento hay una canción. No la ha elegido nada mal Josep Guardiola i Sala.



jueves, 21 de mayo de 2009

Digno legado

Hoy soplaba el viento,
las telas de los pendones se mostraban orgullosas,
A una de esas rachas de aire me agarré,
para soltarme en la estación del pasado.
Hace diez años vivía en mi pueblo,
fue la última vez que cogí el pendón,
No había visto más veces el estandarte,
marca de los pueblos en antiguas batallas.

Al bajar la cuesta de la ermita de Castrotierra,
quizá debido a la distancia,
esa a la que me encuentro de mis raíces,
sentí ese algo que sale de dentro,
y te das cuenta, que hay algo en ti que nunca se va,
es eso de que los lugares son sus gentes,
y las gentes son su infancia,
y su infancia son su escuela,
los partidos de fútbol,
sus tardes de verano,
son su familia y ahí entran los abuelos,
esos a los que les brillan los ojos,
cuando le dices que has cogido el pendón del pueblo,
y tú le correspondes,
con una sonrisa,
con un abrazo
y les das las gracias por días como aquel,
sentados a la sombra,
mientras te contaba lo que solo ellos saben.

En la tela de esos pendones,
se pueden leer las líneas de su historia,
las pinceladas de identidad de cada cultura, de cada región,
quizás sea lo bueno de todo esto, un bien llamado diversidad,
en nuestro caso,
en el color rojo de los pendones del Reino de León.
Entonces, cuando estoy leyendo esas líneas,
miro a mí alrededor
y me doy cuenta que hay más personas mirando el mismo libro,
las que no comparten tu rutina,
pero que recuerdas desde que eres un niño,
cuando por ejemplo,
los encontrabas en la panadería una mañana de invierno,
y mientras afuera nevaba,
nosotros sentíamos el calor de ese horno,
como el de casa,
creo que esa palabra, sea la clave.

Cuando el sol empezaba a ocultarse,
creí ver a mi lado a un hombre conocido,
supongo que fuese San Manuel Bueno, mártir,
el que me dijese que algunas veces,
ciertas ideas, prejuicios o quién sabe cómo llamarlos,
deban quedar a un lado,
aunque solo sea para que la cara de los que nos quieren,
dibuje su mejor sonrisa.
Yo le dije que sí,
que a ver quien era yo para romper las tradiciones,
la cultura de un pueblo, de los pueblos,
cuyo legado depositaron en nuestras manos,
debe persistir,
para que los recuerdos no se difuminen de las líneas de esa tela.


Abel Aparicio González - 2009



























domingo, 17 de mayo de 2009

Extremoduro: La realidad

Ya se la que armaron este verano en Aranda, ya se de las mil y una razones que me podeis dar en contra de Roberto Iniesta, pero cuando escucho canciones como esta, me acuerdo de las palabras que le dijo un profesor en la universidad a un buen amigo mio, con el cual vi el concierto de Extremo en Getafe:
Cuando el Robe se muera, lo estudiaremos en los libros de literatura.
Ahí va esta obra para mi maestra.

Agazapado espero como un "arraclán",
bajo las piedras escondido.
Porque a la vida era lo único que le da sentido.

Acostumbrado a escapar de la realidad,
perdí el sentido del camino,
y envejecí 100 años mas de tanto andar
perdido.
Y me busco en la memoria el rincón
donde perdí la razón,
y la encuentro donde se me perdió
cuando dijiste que no.

Me hice un barquito de papel para irte a ver,
se hundió por culpa del rocío.
No me preguntes cómo vamos a cruzar el río.

Y rebusco en la memoria el rincón
donde perdí la razón,
y la encuentro donde se me perdió
cuando dijiste que no.

Sin ser, me vuelvo duro como una roca
si no puedo acercarme ni oír
los versos que me dicta esa boca.
Y ahora que ya no hay nada, ni dar
la parte de dar que a mí me toca,
por eso no he dejado de andar.

Buscando mi destino,
viviendo en diferido
sin ser, ni oír, ni dar.
Y a cobro revertido
quisiera hablar contigo,
y así sintonizar.

Para contarte
que quisiera ser un perro y "oliscarte".
Vivir como animal que no se altera
tumbado al sol lamiéndose la breva.
Sin la necesidad de preguntarse
si vengativos dioses nos condenarán.
Si por Tutatis (*)
el cielo sobre nuestras cabezas caerá.

Buscando mi destino,
viviendo en diferido
sin ser, ni oír, ni dar.
Y a cobro revertido
quisiera hablar contigo,
y así sintonizar.

(*) Teutates (también llamado Tutatis) es la deidad de la unidad tribal masculina del panteón galo según la antigua mitología celta. Fue el antecesor de los hombres y su legislador, guardián, árbitro así como el defensor de sus pueblos. Formaba parte de los "Dioses de la noche" junto a Esus y a Taranis.

martes, 12 de mayo de 2009

Un leonés en el corazón de Castilla

Este fin de semana estuve en tierras sorianas, visitando a la familia política. Antes de contar mis experiencias, quiero hacer hincapié en dos puntos:
  • Histórico: En Soria hay gran devoción por Alfonso VIII, rey de Castilla. Este hombre estuvo en continuo enfrentamiento con Alfonso IX, rey de León, e intento conquistar sin éxito Astorga, situada a tres kilómetros de mi pueblo. Alguien entiende que dos regiones tan enfrentadas históricamente puedan pertenecer a la misma comunidad autónoma.
  • Político: Creo que en mi vida he visto tantas banderas de un territorio. Ni en Francia, que mira que les gusta, ni en Italia, ni en Cataluña... Es obsesivo lo de estos hombres de la junta, me hace pensar en épocas oscuras de la historia.
Al margen de esto, Soria me gustó, es más, volveré a visitarla. Es una tierra con un gran peso histórico y literario. Con la compañía de Machado fui a ver el Olmo al que escribio, representando en él la enfermedad de su mujer Leonor. Este puede ser el poeta que más me guste, es uno de los grandes.


Estuve en San Juan de Duero, declarado el año pasado cuarta maravilla del
románico español, por detrás de San Isidoro de León, la catedral de Santiago de Compostela y la catedral vieja de Salamanca. Es digno de visitar. Levantado en el siglo XII por los caballeros de la orden militar de los sanjuanistas.




Me di un paseo por el rincón de Bécquer, esquina donde en verano sacan sus
terrazas, un buen lugar para sentarse a descansar, y pensar por ejemplo, en las leyendas sorianas del autor, en la del monte de las ánimas, el rayo de la luna o los ojos verdes





Cuando estaba atarcediendo fui a dar un paseo por el rio Duero, y me encontré
con la ermita de San Saturio, construida sobre la roca. Dicen los lugareños que en esta roca vivía este anacoreta visigodo. La actual ermita se construyo en el siglo XVII, con la misma estructura que había anteriormete, es decir, la del Temple, esos caballeros guerreros que se crearon en teoría para custodiar entre otras cosas, el Camino de Santiago.





Tambien estuve por algunos lugares de la provincia, como el Burgo de Osma, ciudad que sinceramente me decepcionó.



Por Numancia, situada en la localidad de Garay, antiguo asentamiento celtíbero que como no, cayó en manos romanas. En este Cerro sopla el viento a todas horas todos los días del año. Como los romanos no podían conquistarla, construyeron una muralla de nueve kilometros para rodearla, hasta que los numantinos se murieron de hambre o se suicidaron, que tios estos romanos, unos cachondos vamos.

Y para un servidor, lo mejor, fue el cañón del rio Lobos, yo soy hombre de campo y de montaña, y cosas como estas, no se ven todos los días. Hice una ruta pequeñina, de tres kilometros, hasta una ermita templaria y una cueva, digno lugar de visitar.









Me faltó por ver la laguna negra, donde se inspiro Machado para escribir la novelas de Alvar González, pero la veré.


Dicen de la gente de Soria que son muy secos, que no te hablan, que son muy... Yo no tuve esa experiencia. Un hombre me acompañó hasta la tumba de Leonor, la mujer de Machado, y estuvo un rato conmigo hablando sobre el poeta y sobre Bécquer, y no me olvido de Gerardo Diego, el cual tambien escribio a esta ciudad. Otro dato, y este ya está por encima de casi todo, fue el choque de manos que me di con otro atlético viendo el tercer gol de mi equipo, y la charla de despues, sin conocerme de nada, y eso que yo no soy el tio más sociable del mundo.

Buenos recuedos me llevo de esa ciudad, tambien supongo, que contara la compañía, la cual me brindo un trato excelente, a ellos tres, gracias desde dentro. Tengo una con vosotros en la cuenta del debe. Y eso, que me gusta viajar, que hay que viajar, como dice Manolillo Chinato, un poco más allá de las fronteras, las cuales están para eso, para traspasarlas.




jueves, 7 de mayo de 2009

A solas

¿Por qué hay días que tengo ganas de escuchar a Los secretos?
Supongo que porque tiene que haber esos días, sin más.
Días de mirar por la ventana un cielo gris,
con la compañía de un cigarro y de la lluvia.

Supongo que necesitamos de esos días,
sentarnos con nosotros a tomar un café,
pensando a donde caminamos, si queremos esa senda,
dedicarnos algo de tiempo y sacar una balanza,
observando hacia que lado se inclina,
y si ese lado es el nuestro.

Yo soy de los que piensan que no nacemos con algo marcado
soy de los de Machado,
en ningún libro del cielo hay nada escrito sobre mí.
Hasta ahora, creo que lo voy escribiendo bien,
haría algún tachón, pero pensandolo bien,
lo dejaría así, sino, ya no sería Abel.

Calada a calada, se me acaba este cigarro,
pero aún queda tiempo para pensar en los demás,
dicen que la alegría no es absoluta si no la compartes,
creo que he sabido rodearme de los mejores,
si ellos no lo creen así, yo sí.

Se acaba el cigarro y la canción, se acaba ese momento,
en el que buscamos la soledad, no es buena compañera,
sin embargo, hay días que la buscamos,
y cuando llegan esos días, suenan los hermanos Urquijo.

Abel Aparicio González - 2009


martes, 5 de mayo de 2009

El filandón

Una noche de la semana pasada despues de cenar, me puse a buscar información sobre los filandones leoneses (Reunión de hombres y mujeres para hilar y charlar. El filandón tiene su etimología en el verbo “filar” – “hilar”. El leonés, a diferencia del castellano, no perdió las [f] iniciales del latín). Esta palabra la conocí gracias a la librería del mismo nombre que un amiguete tiene en Astorga, Xosepe Vega, del cual os hablaré en siguientes entradas a este blog.

Pues con este nombre encontré una película, con el guión de Jose María Martín Sarmiento y la música de Amancio Prada. La película se desarrolla en la ermita de Colinas del Campo de Martín Moro, ermita levantada para recordar a Pelayo, un soldado que luchó a las órdenes del rey leonés Vermudo II durante las guerras con Almanzor. Los protagonistas de esta película son cinco escritores leoneses:
  • Antonio Pereira (1923-2009)
  • Jose María Merino (1941)
  • Luis Mateo Diez (1942)
  • Julio Llamazares (1955)
  • Pedro Trapiello
Nos narran cinco historias, leyendas o cuentos, llamanseles como cada uno quiera, ocurridas en León. Sobre la catedral de León, sobre una xana, sobre los veranos en los pueblos, sobre la guerra civil y sobre el pantano de Riaño.

Esta tradición, la de los filandones, está volviendo a adquirir importancía, gracias a que varios escritores los están promoviendo. No está mal que se quieran volver a recuparar las tradiciones que algún día, no se sabe muy bien porque, se nos fuerón. Seamos conscientes que León es un pueblo con un gran saco de tradiciones y cultura, esperemos que este no se rompa y se pierdan con el devenir de los años, y las que se están difuminando, vuelva a adquirir la importancia que algún día tuvieron, ya que ellas, las tradiciones, son señas de nuestra identidad.