lunes, 11 de marzo de 2013

Felipe Zapico: El ladrón de peras

Escribo corto
escribo concreto
escribo cortante.

Pero escribo  corto
porque
tengo hojas
cortas


Esperanza de vida

Unas vidas se agotan casi antes de comenzar
otras van tan deprisa
que uno casi
no se entera de su fin.

Algunas esperanzas no tienen vida
muchas vidas no tienen esperanza.

El color de las recetas
alarga la monocromía
de algunas vidas.

Hay aparatos ortopédicos del alma
que ayudan
a
dilatar la cosa
a que dure
como las pilas del conejito.

Hay vidas que se apagan
hay vidas que se arrastran
hay vidas
que no sabemos
que hacen aquí.

Hay vidas que se fueron
pero están
tan cerca
que su aliento a veces te roza la nuca.



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